martes, 26 de abril de 2011
CASTILLO DE SOUTOMAIOR
Os voy a hablar en esta ocasión de uno de los castillos mejor conservados de toda Galicia. Se trata del Castillo de Soutomaior.
Un enclave realmente hermoso que aparte de lo que es el Castillo en sí, hoy en día es también un espectacular museo cargado de elementos a cual mas interesante y que nos retrotráe a épocas medivales.
Sus preciosos jardines, sus murallas, sus torres y demás elementos arquitectónicos asombran por su buen estado de conservación.
El castillo de Soutomaior se encuentra en la provincia de Pontevedra, comarca de Vigo, municipio de Sotomayor, parroquia de San Salvador de Sotomayor, a 18 kilómetros de Pontevedra y 6 kilómetros de la ría de Vigo.
Como ocurre con todas o casi todas estas construcciones, se edificó en un lugar elevado del terreno, en este caso sobre el monte de O Viso, a 119 metros sobre el nivel del mar, un punto estratégico de conexión de la Galicia suroccidental con la central en la confluencia de los ríos Oitavén y Verdugo, enclave natural de enigmática belleza testigo de esta conexión y protector del edificio de ataques normandos, turcos y piratas.
Para llegar al castillo hay que llegar a Arcade, a medio camino entre Pontevedra y Redondela. Desde Arcade esta perfectamente señalizado y puede aprovecharse para ver Ponte Sampaio, A Peneda, con unas fantásticas vistas de la desembocadura del los ríos Verdugo y Oitavén en la ría de Vigo, y otros monumentos románicos.
Se desconocen los orígenes del castillo y la cronología exácta de su construcción, pero su fundación hay que vincularla a Don Pax Méndez Sorrede, que vivió en tiempos de Alfonso VII (1126-1157) y de Don Fernando de León (1157-1188), y que fue el primero en utilizar el apellido Sotomayor. Según documentación escrita, éste pobló su Soto llamándole el Mayor.
La familia Sotomaior sería uno de los linajes que participaría en la Baja Edad Media en los acontecimientos políticos cruciales de la historia de Galicia, caso de los enfrentamientos con el clero, con participación también en la revuelta Irmandiña de 1467 y en los problemas sucesorios de Enrique IV de Castilla. Esto significa que la Casa Soutomaior era un potente bastión de nobleza y poder. Entre los miembros más célebres de esta familia aparecen Pax Gómez de Soutomaiuor, por su pericia política, o Pedro de Soutomaior, el más renombrado miembro de esa estirpe, conocido como Pedro Madruga, conde de Camiña, que pasó a la historia como personaje cargado de misterio y leyenda. A su muerte, en 1486, comienza una serie de problemas sucesorios que no tendrían solución hasta 1795, cuando la Chancillería de Valladolid otorga al Marqués de Mos el derecho a los bienes de la rama de la familia de Soutomaior. Desde este momento, el nuevo dueño del castillo sustituye el escudo del Ducado de Soutomaior, situado sobre la puerta sur, por otro con las armas de su casa.
Otra fecha clave para este edificio es la de 1870, cuando los marqueses de Armijo sitúan allí su residencia veraniega. En este año comienza una reforma en la que el castillo, sin perder su aspecto bélico, se convierte en una residencia estival palaciega. Se desconoce el nombre del arquitecto artífice de esta reforma, pero se sabe que fue de rápida ejecución. También el parque del costado oriental fue intervenido con varias construcciones de carácter subsidiario, y replantación con árboles de especies exóticas.
En este tiempo se desarrolla una vida social y política intensa que continuaría la sobrina del marqués, la Marquesa de Ayerbe. Ella y su segundo esposo convertirían el castillo en un centro de conspiraciones políticas, lo que haría que perdiesen su propiedad y pasase a subasta pública en octubre de 1917. Se inicia entonces otra etapa de abandono y deterioro del edificio, hasta que en 1982 lo adquiere la Diputación de Pontevedra, a quien pertenece en la actualidad.
Es una edificación con doble perímetro amurallado, de planta oval y forma irregular que responde a necesidades del terreno. En el primer cinturón se abren dos entradas, la sur es la que se utiliza hoy como acceso público, siendo la primitiva la del lado opuesto.
Dos partes componen el complejo fortificado, la torre y el palacio adosado a la misma. Hay que destacar el puente levadizo que comunica con la torre y que supone un elemento importante en su defensa. La profusión de las saeteras y vanos que existen en sus muros y torres son más de tipo decorativo que defensivo.
La torre del homenaje consta de varias plantas. Su estructura es rectangular y sus muros de enorme grosor, sobre todo en la planta baja. La entrada está ubicada en la primera planta, donde se hallaba el puente levadizo. La última parte se destinaba al almacenaje. Esta torre es la parte más antigua del edificio.
La Revuelta Irmandiña (1467) supuso para el castillo un duro golpe, tras el cual fue inevitable una intervención en la segunda mitad del siglo XV. En estos tiempos se traza el segundo cinturón amurallado (no se sabe si sustituyendo a otro), que sería construido ex novo, puesto que no aparece ningún resto anterior. A partir de esta fase nos encontramos ante la mencionada edificación con doble perímetro amurallado, de planta oval y forma irregular.
En esta muralla se presentan novedades constructivas, caso de las troneras, lo que revela la existencia de comunicaciones interiores, hoy tapiadas. Aunque no sabemos con exactitud qué partes se derruyeron tras el citado conflicto, sí sabemos que la destrucción no fue total, puesto que aún hoy se aprecian muros de época anterior.
Otra importante intervención constructiva fue la realizada por los marqueses de la Vega de Armijo en 1870, que renovaron tanto el interior como el exterior. Los nuevos propietarios aceptan un diseño muy considerado por las corrientes constructivas del momento, como son los historicismos arquitectónicos: una mirada al pasado medieval, impulsada por el romanticismo. El nuevo aspecto del edificio sería el de una vivienda palaciega neogótica. Se abren galerías, puertas y ventanas con arcos ojivales al exterior; en el interior se construyen nuevas escaleras, una capilla, salones con artesonado de madera y chimeneas. En cuanto a las murallas, se construye la mayor parte del parapeto y almenas del recinto exterior. Los parapetos almenados, saeteras y gárgolas que rematan los muros exteriores también son de este momento. Aunque hoy desconocemos el nombre del arquitecto, cabe decir que esta intervención de finales del siglo XIX no supone ninguna ruptura estilística de la edificación con su esencia medieval.
Como vemos en la inmensa mayoría de estas construcciones, se utiliza la piedra perfectamente labrada y colocada de forma horizontal una seguida de otra. La piedra es el material más utilizado quizá porque es una de las materias primas más fuertes y duraderas para la construcción.
En 1982 el castillo pasó a manos de la Diputación provincial de Pontevedra, quien encarga a un equipo de expertos la restauración del conjunto. Se procede a un estudio histórico y se analiza su evolución constructiva. Asimismo, se replantea todo el conjunto, hasta llegar a la solución de enfatizar el diálogo entre fortaleza militar medieval y palacio medieval decimonónico. Se reponen elementos, caso de los techos artesonados de madera del palacio neogótico; las carpinterías exteriores se sustituyen por otras, cerrando con lunas de seguridad, sin carpintería, los huecos en donde no existía madera; y se repone la cubierta del castillo por una estructura metálica, ofreciendo mayor volumen utilizable.
La nueva modificación en la Galería de las Damas permite que ésta sea visitable, ofreciendo un nuevo mirador sobre el patio de armas. En conclusión, puede decirse que las remodelaciones llevadas a cabo en todo el conjunto se efectuaron con gran rigor, evitando afectar a las partes originales del edificio.
Está abierto los días laborables de 16 a 20 horas. Los sábados, domingos y festivos por las mañanas de 11 a 13 horas y por las tardes de 16 a 20 horas. Se accede por un puente levadizo y cuenta con unos cuidados y hermosos jardines.
Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.
Un lugar realmente bonito y cargado de todo tipo de elementos a cual mas interesante. Si os pasáis por aquella zona no dejéis de visitarlo.
Para que podáis ir abriendo boca, os dejo un par de archivos de video en los que os podréis hacer una idea, tanto del interior del Castillo como del exterior y su entorno.
(Recordad que para la perfecta escucha de audio y video en este blog,deberéis desactivar la música de fondo en el reproductor que encontraréis en la parte mas baja del mismo)
INTERIOR DEL CASTILLO.
EXTERIORES DEL CASTILLO
Un cordial saludo .Eugenio Karkallón.
Fuente consultada para la realización de este reportaje:
www.soutomaior.com
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