jueves, 15 de marzo de 2012
PENADAUGA
Escondida en una pequeña aldea de la provincia de Pontevedra, se halla una gran roca granítica que aunque hace ya miles de años está allí enclavada, son tan solo unos cuantos siglos los que han pasado desde que la piedra fuera cristianizada, dándole a partir de este momento, atribuciones curativas y milagrosas.
Os hablo de la gran piedra santa de Penadauga.
Sita en el medio de una pequeña aldea del mismo nombre, todo en Penadauga gira entorno a la bonita y enigmática piedra.
Penadauga es una aldea perteneciente a la parroquia de Escuadro, en Silleda(Pontevedra). A día de hoy apenas cuenta con una población de unas 15 personas.
El origen de esta piedra se remonta a la época megalítica, cuando los diversos movimientos geológicos producidos a lo largo del tiempo fueron dejando al descubierto ésta y otras formaciones rocosas, a cual mas impresionante, que por aquella zona abundan de una forma espectacular.
Fue mucho mas tarde cuando la iglesia se apropia de ella y la cristianiza bajo la advocación a Santa Isabel.
Ya desde tiempos inmemoriales se celebra todos los 2 de Julio, una de las romerías mas antiguas de Galicia en torno a esta piedra y a la Santa.
Es una fiesta profundamente religiosa, de la Galicia más profunda, que mezcla el animismo, paganismo y cristianización; donde el motivo de la fe está en la sanación de dolencias relacionadas con la piel, vista y huesos a través de la invocación de la Santa y de la realización del ritual de diversos actos en la piedra sagrada, lo que hace que los romeros en algunas ocasiones reciban gracia divina y vean solucionados milagrosamente sus problemas de salud.
Los romeros, que son miles, con dolencias de piel (soriasis, verrugas, dermatitis), de vista o de huesos, tienen un protocolo a seguir. Asistir a una misa en honor a la Santa, pasar por debajo de la imagen cuando sale la procesión y acudir a Penadauga para lavar las partes dañadas en el auga que está sobre la roca, o bien, restregarse con la parte del cuerpo enferma.
Para completar el programa terapéutico y en la medida de las posibilidades, puede donar en ofrenda, un animal o cualquier otra cosa a la iglesia para que sea pujada públicamente entre los asistentes, en el atrio del santuario.
En estas pujas se pueden alcanzar cantidades realmente notables, como es el caso de algunos romeros que llegan a pujar por alguna gallina, conejo u otro animal de granja hasta los 800-1.000 Euros, que finalmente van a parar a la parroquia en forma de ofrenda a Santa Isabel.
La roca, tiene en torno a los tres metros de altura. En lo alto de la misma, se ha creado una cavidad en la que todo el año existe una buena cantidad de agua. Este agua ya estancada por el tiempo se supone que es la que cura las enfermedades relacionadas con la vista, el oído y la piel, y con ella los romeros se untan las partes afectadas para a través de la profunda fe que procesan a la Santa sus males se vean mitigados.
Aparte de la aplicación de este agua curativa, los romeros acostumbran a echar monedas en la cavidad, por lo que pueden verse en el fondo del pequeño estanque, multitud de monedas de todo tipo.
Cuenta la leyenda popular, que el origen de la fiesta viene de cuando una mujer iba todos los días a lavarse a la parroquia próxima de Graba y en el camino quedaba a dormir en la parte de arriba de una roca existente en el lugar de Penadauga. Un día esta mujer desapareció, pero en su sitio se colocó su figura hecha en piedra. Los vecinos de Graba reclamaron la estatua declarando que era suya, pero aunque la llevaron, ella siempre volvía para la roca. Después de muchas discusiones se llegó a un acuerdo de manera que la estatua quedó en Escuadro a cambio de una campana. La figura de piedra en cuestión resultó ser la Sta. Isabel que ahora se venera en la iglesia de la parroquia de Escuadro, aunque también quedó su perfil en la concavidad de la roca de Penadauga.
Fuera de la iglesia, apenas a mil metros, en el lugar de Penadauga se escenifica la fusión de la tradición pagana con la religiosa. Todo apunta a que la «pena de auga» es en realidad un ara celta invertida. Penadauga debió ser un lugar de culto pagano, pero la religión asimiló los ritos ancestrales y los incorporó como parte fundamental de la romería de Santa Isabel.
En la parte inferior de la roca, la caprichosa forma de la misma, ha formado una pequeña cavidad en la que los romeros y fieles que hasta allí se acercan, dejan posados en ella diversos exvotos, cirios, figuras religiosas y otros diversos objetos en forma de ofrendas a la Santa.
En mi visita pude ver allí gran cantidad de velas y cirios, exvotos de cera que representaban brazos, piernas, cabezas. También algunas personas realizan objetos artesanos a base de conchas, ramas y madera que representan crucifijos y murales religiosos realmente llamativos.
Se ha creado en la parte posterior de la gran roca una escalitana con barandilla, para facilitar el ascenso a la parte mas alta y así poder tener acceso a la gran pía inundada donde se encuentra el famoso agua curativo de la Penadauga.
Realmente es un lugar escondido y por el que puedes pasar perfectamente al lado sin darte cuenta de esta bonita piedra, pero para los vecinos de aquella comarca, se trata de un lugar mágico, por el que el tiempo ha ido pasando sin apenas cambiar su forma, y donde desde hace miles de años, nuestros antepasados ya realizaban sus diversos ritos. Primero paganos y mas tarde ya de carácter religioso.
Un lugar sin duda de gran poder, en el que tocando esa roca te transportas a otra época, cuando todo era mas puro y mas espiritual. Una sensación fantástica te envuelve cuando te cobijas debajo de ella, entre todos esos exvotos que como testigos mudos intentan de algún modo fusionarse con la naturaleza y con los ritos mágicos que allí se han producido.
Merece la pena acercarse a tocarla, a sentirla, y a mojarse las manos con esa agua turbia y amarillenta, ya que aunque su aspecto no es el más agradable, sin duda posee algo que la hace muy especial.
Os invito a conocerla, a ella y a sus gentes , quienes viven a su lado cuidándola y mimándola a sabiendas de todos los bienes y alegrías que para ellos supone tenerla al lado.
De nuevo aprovechando esa pequeña cavidad que os he comentado cargada de todo tipo de objetos mágicos, me dispuse en mi visita a realizar algunas pruebas de grabación de audio con el fin de obtener algún registro parafónico en el lugar.
Estaba completamente solo en la Roca. La pequeña aldea de apenas un puñado de casas estaba vacía y lo único que escuchaba de vez en cuando era el ladrido lejano de algún perro.
Coloque mis grabadoras en la parte mas profunda de la cavidad y me dispuse a realizar varias tandas de grabación. Mis expectativas se vieron cumplidas cuando llegué a casa y volqué el material grabado, ya que en algunos cortes se quedaron registros sonoros que no deberían de haberse producido.
Os dejo los resultados obtenidos en este video.
(Recordad que para la perfecta escucha de archivos de audio y video en este blog, deberéis desconectar el sonido de fondo en el reproductor que encontraréis en la parte mas baja del mismo)
Sin más me despido, agradeciendo de nuevo vuestra atención.
Edición, foto y video por Karkallón.
Análisis de audio por Jordi Bosch
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